Tan solo te pido una cosa; se justa.
Si necesitas espacio lo tendrás, si quieres intimidad ya es tuya, si precisas que me aleje lo haré, si deseas que te escuche callaré. Pide, y lo que esté en mi mano lo tendrás.
Pero recuerda ser justa.
Igual que un beso no alivia un golpe, una acción ruin no anula un gesto generoso. Un día de lágrimas no borra uno de sonrisas y caricias. Una desconfianza no mata una lealtad. Y ningún regalo compensa un robo.
Sé perfectamente cuanto he hecho, no albergo ninguna duda de que tu huida de mi lado está más que justificada. A veces incluso me pregunto cómo fuiste capaz de soportarlo tanto tiempo.
Pero necesitas ser consciente, por que lo merecemos, de todo lo que hemos pasado. De lo oscuro pero igualmente de lo luminoso.
Seguramente necesites tiempo, paz de espíritu y sentirte del todo liberada. Pero no cometas el error de pensar que todos estos años fueron a la basura.
Por tiempos, y a veces largos, fuimos muy felices. Ni tú, ni yo, ni nosotros, merecemos cálculos matemáticos que eliminen nuestros pequeños paraísos por los inmensos sufrimientos.
Corre, vive, grita. Seré feliz viéndote ir..
Pero por favor no te conviertas en una persona desconfiada, no te vuelvas cicatera en los afectos, no te recicles en temerosa a los quereres. Vuelve a ser tu, vuelve a vivir. Lo mereces tu , y lo merecen los que te rodean.
Permite al mundo disfrutar de la mujer que yo conocí.
Buen viento
gran relato, se palpa el amor verdadero, trasmite muy bien los sentimientos, enhorabuena
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muy positivo. Aplica para toda clase de amor 🙂
Me gustaMe gusta